TÍTULO: Un millón de pequeñas cosas.
AUTOR: Susan Mallery.
PUNTUACIÓN: 2 de 5.
NÚMERO DE PÁGINAS: 382.
EDITORIAL: Harper Collins Ibérica.
GÉNERO: Romance contemporáneo.
FECHA DE PUBLICACIÓN ORIGINAL: 30 de enero de 2020.
SINOPSIS:
¡La amistad no es solo una cosa, sino un millón de
pequeñas cosas, y nadie escribe sobre ellas con más corazón y humor que Susan
Mallery!
Zoe Saldivar no solo estaba soltera; estaba sola.
Acababa de romper con su novio, trabajaba desde casa y Jen, su mejor amiga,
estaba tan obsesionada con su bebé que prácticamente había abandonado su
amistad. El día en que Zoe se quedó atrapada accidentalmente en su ático con su
gato hambriento se dio cuenta de que dependía solo de ella dejar de vivir en
soledad.
Pero su vida aparentemente vacía se complicó de
pronto: la primera nueva amiga que hizo era Pam, la madre viuda de Jen, y, el
único chico que logró que volviera a sentir mariposas revoloteándole por el
estómago era el hermano de Jen. Mientras tanto, su padre, un hombre de encantos
embriagadores como el tequila, se proponía seducir a Pam.
Pam estaba aturdida y nerviosa, Jen estaba enfadada, y
Zoe estaba empezando a pensar que, después de todo, estar sola no estaba tan
mal.
OPINIÓN PERSONAL:
¡Hola! Hoy os traigo la reseña de “Un millón de pequeñas
cosas” de Susan Mallery, antes de nada quiero agradecer a la editorial el envío
de este ejemplar.
El libro empieza cuando Zoe le cuenta a su gato (si, la
protagonista habla con el gato), que se ha acostado con su ex Chad en un
momento de debilidad, lo que más adelante supondrá un problema muy grande y
ella estará muy arrepentida por sus actos.
Zoe quiere seguir la tradición de su madre y celebrar los
cambios de estación (cosa en la que no profundizan demasiado en el libro),
cuando sube al desván para coger las cajas de la decoración se queda encerrada
con su gato Mason, aunque tras muchos intentos (y pensamientos de que va a
morir sin que nadie se dé cuenta), logra salir de ahí.
Jen su supuesta mejor amiga (que a mí al principio me cae
bastante mal), está preocupada porque su hijo de dieciocho meses no habla
(aunque es un niño muy inteligente, eso sí es verdad, más adelante
descubriremos por qué no habla), me parece que Jen presionaba mucho al bebe y tenía
una preocupación que era obsesiva, ella piensa que una de las razones por las
que no habla es que puede ser autista (que desde ya digo que esa no es la razón
de porque Jack no habla), Kirk el marido de Jen es policía, cosa que crea aún más
ansiedad a Jen.
Zoe trabaja traduciendo manuales pero echa de menos su
trabajo como profesora de secundaria, en una conversación con Pam (madre de
Jen), la confiesa que echa mucho de menos a su madre, que murió hacia poco más
de un año.
El padre de Zoe, Miguel, se divorció de su madre cuando
Zoe tenía once años, pero lejos de llevar una relación mala, se llevaban
bastante bien, y se querían como amigos (vamos que fue un divorcio bastante
bueno), Miguel después del divorcio se convirtió en un mujeriego, aparte de que
era un hombre bastante atractivo trabajaba de imagen para la empresa familiar.
Steven que es el hijo de Pam y el hermano pequeño de Jen,
va a casa de Zoe a ayudarla con el problema que tuvo en el desván (para
arreglárselo), a pesar de que habían coincidido en alguna que otra ocasión, en
esta última saltan chispas entre ellos.
Pam es la que provoca el acercamiento entre Steven y Zoe,
ya que es ella la que le dice a Steven que vaya a casa de Zoe para arreglarla
la trampilla que va al desván, ese día la invita a tomar una copa, y como he
dicho antes la atracción que surge entre ellos es increíble.
Steven y Zoe empiezan a salir enserio. Pam y Miguel, a
pesar de que a sus respectivos hijos no les hace mucha gracia, también empiezan
a quedar (aunque Pam no está muy segura de eso).
Jen teme el trabajo de su marido Kirk por el riesgo y no
se fía de su compañero Lucas, porque piensa que es un inconsciente y un cabra
loca, pero no es así, en un tiroteo Lucas protege a Kirk y recibe dos balazos
por protegerle, asique Jen (que se siente muy agradecida por lo que ha hecho
por su marido), ofrece que Lucas se quede en su casa, para ayudarle en su
recuperación, durante las semanas que pasa en su casa empieza a apreciar a
Lucas, y ve lo que Jack le adora, asique pasa a ser uno más de la familia.
La empresa farmacéutica de Zoe la llama, para avisarla de
que las inyecciones de sus pastillas anticonceptivas han estado dando problemas
y tiene que ir a hacerse las pruebas por si estuviese embarazada, haciendo
cálculos después de que los resultados le den positivo se da cuenta de que él
bebe es de Chad (por eso se arrepiente en cierta forma de haber caído en la
tentación de volver a acostarse con él), ella cree que lo mejor es dejar a
Steven así que decide llamarlo para acabar su relación con la excusa de que no
es por él sino por ella (que en eso tiene algo de razón), pero Steven aparece
al rato en la puerta de su casa para pedirle explicaciones, cuando le dice que
es porque está embarazada, él no la deja, solo le pide un tiempo para
asimilarlo, ya que ambos se quieren de verdad.
Pam que me parecía un personaje interesante al principio,
a la que veía que no juzgaba a la primera, he de confesar que según ha ido
pasando el libro se me ha hecho insoportable e inaguantable, o sea ella se
puede meter en la vida amorosa de sus hijos, pero oye si es del revés ella se
cabrea y les deja de hablar ¿hola?, mira me caes mal #SorryNotSorry, cuando
Steven le cuenta lo del embarazo de Zoe, ella insiste en que no pueden estar
juntos, cosa que Steven como es lógico no acepta, es mayorcito para saber lo
que quiere en la vida, o sea que no tiene quince años es un hombre hecho y
derecho, y vale es su madre, pero una cosa es aconsejar y otra obligar, creo
que cada quien debería elegir la vida que quiere llevar, sin sentirse obligado
o coaccionado.
Aunque Pam no quiere que su hijo este con Zoe, acaba
recapacitando y aceptando lo que ambos quieren, que faltaría más que fuese lo
contrario vamos…
Steven le pide a Jen a buscar un anillo de compromiso
para Zoe, ya que él quiere que se case con él y formar una familia, por otro
lado Jack acaba hablando con Jen, el problema era que hablaba con otras
personas, pero con su madre no hacía falta ya que sabía que con signos ella
sabría que quería decir siempre, porque tenían una conexión (sin que Jen lo
supiese) bastante grande.
En resumen es un libro que te lees en una tarde eso es
verdad, pero que se te hace algo lento y pesado también es cierto, para mi
sobran muchas páginas y me indignaban muchas escenas.
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